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Oración para los jóvenes

junio 10, 2023
Oración para los jóvenes

Oración para los jóvenes

Hola, queridos lectores. Hoy quiero compartir con ustedes una oración para los jóvenes, que es muy importante en estos tiempos difíciles que estamos viviendo. La oración es una forma de comunicarnos con Dios y de expresarle nuestro agradecimiento, nuestras necesidades y nuestros deseos. También es una forma de fortalecer nuestra fe y nuestra confianza en su amor y su providencia.

Esta oración es muy bonita y profunda, porque nos invita a reflexionar sobre nuestro papel como jóvenes cristianos en el mundo. Nos llama a ser luz y sal de la tierra, a ser testimonios de Cristo y de su Evangelio, a ser agentes de cambio y de esperanza. Nos recuerda que Dios nos ama y nos cuida, y que debemos confiar en él y seguir sus mandamientos.

Los animo a que hagan esta oración con frecuencia y con devoción, y que la compartan con otros jóvenes que también necesiten acercarse a Dios.

Oración para los jóvenes

¡Padre Santo!

Te pedimos por nosotros, los jóvenes,

que somos la esperanza del mundo.

No te pedimos que nos saques de la corrupción

sino que nos preserves de ella.

No permitas que nos dejemos llevar

por ideologías mezquinas.

Que descubramos que lo más importante

no es ser más, tener más, poder más,

sino servir más a los demás.

¡Padre! Enséñanos la verdad que libera,

que rompe las cadenas de la injusticia,

que hace hombres y forja santos.

Pon en nosotros un corazón universal

que hable el mismo idioma,

que no vea el color de la piel,

sino el amor que hay en cada uno.

Un corazón que a cada hombre

le llame hermano,

y que crea en la ciudad

que no conoce las fronteras,

porque su nombre es universo,

amistad, amor, Dios.

¡Padre Santo! Cuida a nosotros, los jóvenes.

Amén.

Oración de consagración a Dios

Bendito y alabado seas Dios mío.

Te doy gracias por el don de la vida

y por crearme a tu imagen y semejanza.

Te consagro mi vida entera

y te ofrezco todo lo que soy,

y todo lo que tengo.

Quiero vivir para ti y para tu gloria.

Quiero cumplir el plan que tienes para mí

y ser un instrumento de tu amor.

Te pido que me bendigas, me guíes

y me protejas de todo el mal.

Que tu Espíritu Santo me ilumine,

me fortalezca y me santifique.

Que tu gracia me acompañe siempre

y que tu voluntad se haga en mí.

Amén.

Oración de confianza en Dios

Dios mío, tú eres mi Padre y mi amigo.

Tú me conoces mejor que nadie

y sabes que es lo que necesito.

Tú me amas con un amor infinito

y quieres lo mejor para mí.

Por eso, confío en ti y en tu providencia.

Sé que tú estás conmigo en todo momento

y que nunca me abandonas.

Sé que tú tienes el control de todo

y que nada puede separarme de ti.

Te pido que aumentes mi fe,

mi esperanza y mi amor en ti.

Que no me deje llevar por el miedo,

la duda o la ansiedad del momento.

Que no me preocupe por el mañana,

sino que viva el hoy con alegría y confianza.

Pongo en tus manos mis preocupaciones,

mis problemas y mis sueños.

Que me abandone en ti y tu misericordia.

Amén.

Oración de alabanza a Dios

Dios mío, te alabo y te glorifico

por ser el Señor de todo lo creado,

el Rey de reyes y el Señor de señores.

Te alabo por tu grandeza, tu poder,

por tu sabiduría y por tu bondad.

Te alabo por tu amor, tu gracia,

por tu fidelidad y tu misericordia.

Te alabo por todas las maravillas

que has hecho en la historia y en mi vida.

Te alabo por los dones que me has dado

y por las personas que has puesto en mi camino.

Te alabo por estar siempre cerca de mí

y por escuchar siempre mi oración.

Te alabo por ser mi refugio, mi fortaleza,

por ser mi consuelo y mi salvación.

Te alabo con todo mi ser y con toda mi alma.

Te alabo porque tú eres digno de alabanza.

Amén.

¿Cómo pueden los jóvenes acercarse a Dios?

Esta es una pregunta que muchos se hacen, especialmente en estos tiempos de crisis, violencia y confusión. Pero, la Biblia nos ofrece algunas respuestas y orientaciones para vivir una fe auténtica y comprometida con el Señor.

En primer lugar, los jóvenes deben reconocer que Dios los ama y los ha creado con un propósito. Cada uno de nosotros es único e irrepetible, y tiene una misión que cumplir en este mundo. Por eso, es importante que se pregunten: ¿Qué quiere Dios de mí? ¿Cuál es su plan para mi vida? ¿Cómo puedo descubrir y seguir su voluntad?

En segundo lugar, deben buscar a Dios en la oración. La oración es el diálogo personal y confiado con el Padre celestial, que nos escucha y nos habla al corazón. Nos ayuda a conocer mejor a Dios, a expresarle nuestro amor, nuestra gratitud, nuestras necesidades y nuestras súplicas. También nos fortalece para resistir al mal y para hacer el bien.

En tercer lugar, deben alimentar su fe con la Palabra de Dios y los sacramentos. Los sacramentos son signos eficaces de la gracia de Dios, que nos perdonan, nos sanan, nos unen y nos envían como discípulos misioneros. Entre ellos, la Eucaristía es el centro y la cumbre de la vida cristiana, donde recibimos el Cuerpo y la Sangre de Cristo.

En cuarto lugar, deben participar activamente en la Iglesia y en la sociedad. La Iglesia es la familia de Dios, donde los jóvenes pueden encontrar un espacio de acogida, de comunión, de formación y de servicio. Los jóvenes también deben ser protagonistas en la transformación del mundo, según el Evangelio. Que el Espíritu Santo les guíe y los acompañe en su camino de fe. Y que Dios les bendiga siempre.